El administrador general del Registro Inmobiliario destacó los logros alcanzados durante la pandemia para ofrecer el servicio afianzado en la virtualidad, cambios tecnológicos que ya estaban contemplados en el Plan Visión Justicia 20/24 y que fueron acelerados por la crisis sanitaria.
SANTO DOMINGO (RD). El administrador general del Registro Inmobiliario de la República Dominicana participó en la Conferencia Iberoamericana “La Respuesta Tecnológica del Registro ante el COVID-19” celebrada virtualmente entre los miembros de la Red Registral Iberoamericana (IBEROREG), con el objetivo de socializar buenas prácticas de dichas organizaciones ante la pandemia y analizar la realidad registral de cada país.
Durante su participación en la actividad, Jhonattan Toribio explicó cómo la situación sanitaria provocada por el COVID-19 ha modificado la atención ciudadana en las oficinas del Registro Inmobiliario y expuso cuáles han sido las medidas y las herramientas tecnológicas utilizadas para garantizar y mantener el servicio a los usuarios durante el tiempo de pandemia.
Explicó que, a raíz de la declaratoria del estado de emergencia, se aceleró la automatización de 10 oficinas de registro de títulos, se implementó el teletrabajo y la continuación del servicio por los canales electrónicos.
Otras de las medidas asumidas por el Consejo del Poder Judicial de RD para facilitar el uso de los servicios fue la implementación de la firma electrónica, el establecimiento del modelo de servicio judicial y del registro inmobiliario digital como soportes del Plan de Continuidad de Labores.
El funcionario explicó que el CPJ también aprobó la creación del registro inmobiliario, a través del cual se establece un Consejo Directivo que permite una administración bajo un sistema integral y un consejo consultivo que integra la colaboración intersectorial y participativa de los actores relevantes del sector.
Exhibió como logros y buena práctica en el país que a través del teletrabajo el ingreso de trámites por la vía digital pasó de un 7 a un 51%, se pasó de 100 mil a 324 mil visitas al portal web, la atención presencial es por citas que se generan a través del portal web, fue habilitado el servicio de retiro y deposito remoto a nivel nacional y el depósito desatendido usando buzones.
Informó que atienden un total de 11 mil 602 citas, 1,036 comparecencias virtuales, 11,593 llamadas telefónicas y 3, 953 solicitudes vía correo electrónico al mes.
“En la actualidad nos encontramos implementando la transformación en un registro inmobiliario digital que contemple la habilitación de un portal transaccional donde el usuario pueda desde un escritorio virtual, hacer su trámite de depósito, retiro, acceder a los documentos públicos, a la cartografía, consultar estados, ver el catálogo de servicios que se prestan y eventualmente realizar pagos electrónicos de las tasas por servicios”, explicó Toribio.
En la actividad IBEROREG, participó en representación del Registro de Títulos de la República Dominicana, su director nacional Ricardo Noboa Gañán. Un común denominador que tienen los países integrantes de esta entidad es la utilización de los recursos tecnológicos para mantener los servicios registrales y evitar el contagio del COVID 19.
Algunos de los países coincidieron en la implementación de la firma digital, servicios a través de las plataformas digitales, seguimiento del estatus de solicitudes vía portal digital, el teletrabajo, y la comunicación vía telefónica o correo electrónico para que el retiro de documentos y de esa forma evitar la aglomeración de personas, entre otras medidas para mantener los trabajos en el contexto del COVID 19.
IBEROREG es un proyecto de interconexión de las organizaciones de los registros públicos a la que pertenecen los países Argentina, Brasil, Colombia, Chile, Costa Rica, Ecuador, España, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Portugal, República Dominicana y Uruguay.
La finalidad de esta organización es servir como espacio de colaboración donde se comparta información precisa y útil a los ciudadanos y administraciones de los países miembros, además de convertirse en un espacio de intercambio académico de conocimientos actualizados sobre el sistema registral vigente en cada país.