En la actualidad, el Sistema Registral se encamina a una transformación profunda para reforzar sus niveles de eficiencia con base en el uso de la tecnología.
SANTO DOMINGO (RD).- El Sistema Registral Inmobiliario de la República Dominicana celebra 100 años, luego de que la ordenanza ejecutiva número 511 del 1 de julio de 1920, estableciera un registro inmobiliario inspirado en el Sistema Torrens, y sentara las bases para el desarrollo del sector en el país. Esta fue sustituida por la Ley 1542 de Registro de Tierras, del 1947, y más recientemente por la actual Ley 108-05, de Registro Inmobiliario.
La legislación vigente facilitó la incorporación de modernas tecnologías y procedimientos, tales como: la técnica del folio real, el uso del GPS para la ubicación de las parcelas, la implementación de sistemas informáticos para el control y organización de archivos, publicidad de la información y manejo de operaciones en los distintos órganos de la Jurisdicción Inmobiliaria.
La Jurisdicción Inmobiliaria (JI), dependencia del Poder Judicial, resaltó que la introducción del referido sistema Torrens representó un avance significativo y un punto de partida para el desarrollo del mercado inmobiliario al poder determinarse con certeza el estado físico y jurídico de los inmuebles registrados.
El administrador general de la JI, Jhonattan Toribio, declaró que para la institución resulta retador y motivador que este centenario se cumpla en el justo momento en que el sistema registral se somete a una transformación profunda dirigida a fortalecer sus niveles de eficiencia, transparencia y accesibilidad.
“El plan estratégico Visión Justicia 20/24 contempla la revisión y actualización del marco normativo, la prestación de servicios por canales digitales, la estandarización y mejora de los tiempos de respuestas a los usuarios, la eliminación de la mora, la implementación de la firma electrónica y del fortalecimiento de las capacidades de gestión”, explicó.
El funcionario expresó que otro gran desafío lo constituye alcanzar los 100 años en medio de la pandemia por el COVID-19, que obligó al distanciamiento físico y a replantear la modalidad de servicio en las instituciones.
Durante el período de excepción, la Jurisdicción Inmobiliaria alcanzó la automatización del 100% de las oficinas de Registro de Títulos e implementó el teletrabajo en el equipo de analistas jurídicos, técnicos revisores y calificadores, además de los equipos de gerencia y supervisión. Desde el 23 de marzo al 28 de junio de 2020 ingresaron unas 18,885 solicitudes, se precalificaron 35,612 expedientes y se calificaron 32,395. Adicionalmente, se implementaron los siguientes servicios en línea: solicitud de citas presenciales, depósito desatendido, acceso al parcelario catastral, y las comparecencias y consultas por canales virtuales.
Los aportes del Sistema Torrens
Toribio resaltó que la introducción del sistema Torrens representó una ruptura con una situación de gran cantidad de títulos de terrenos confusos y dudosos que impedían el fomento de la riqueza del país y que daban origen a que los verdaderos dueños se vieran despojados de sus tierras. Este método permitió “satisfacer las demandas de conocimiento sobre el estado físico y jurídico de los inmuebles registrados, dotar de mayor seguridad al tráfico inmobiliario, fomentar el crédito territorial, promover la circulación de la riqueza y brindar certeza sobre los derechos reales inmobiliarios”, agrega.